El curso se acaba y en clase no vamos a tener tiempo de comentar todos los poemas de las Veinte poemas de amor y una canción desesperada. Os animo a realizar vuestros comentarios aquí en el blog.
El jueves no nos dio tiempo ni a leer ni a comentar uno de los poemas más conocidos de este libro.
Me
gustas cuando callas porque estás como ausente,
y me oyes
desde lejos, y mi voz no te toca.
Parece que
los ojos se te hubieran volado
y parece
que un beso te cerrara la boca.
.
Como todas
las cosas están llenas de mi alma,
emerges de
las cosas, llena del alma mía.
Mariposa
de sueño, te pareces a mi alma,
y te pareces
a la palabra melancolía.
.
Me gustas
cuando callas y estás como distante.
Y estás
como quejándote, mariposa en arrullo.
Y me oyes
desde lejos, y mi voz no te alcanza:
Déjame
que me calle con el silencio tuyo.
.
Déjame
que te hable también con tu silencio
claro como
una lámpara, simple como un anillo.
Eres como
la noche, callada y constelada.
Tu silencio
es de estrella, tan lejano y sencillo.
.
Me gustas
cuando callas porque estás como ausente.
Distante
y dolorosa como si hubieras muerto.
Una palabra
entonces, una sonrisa bastan.
Y estoy alegre,
alegre de que no sea cierto.
¿Qué tenéis que decir sobre él? Si no sois aún contribuyente, mandadme un correo a marisierraprofe@gmail.com y yo os mandaré la invitación (aunque ya lo hice al comienzo de curso).
No hay comentarios:
Publicar un comentario